Dependiendo de la visión inversionista de cada persona, adquirir casas o terrenos implica cuestiones muy diferentes, y cada una supone ventajas y desventajas, que se tendrán que evaluar de manera profunda.
Invertir en un patrimonio para beneficio propio y de la familia, no es un tema que deba tomarse a la ligera. Implica una responsabilidad muy grande, porque de hacerlo bien o mal, invariablemente incidirá en la economía y finanza de cada persona. Además, hay que cuidarse de las malas propuestas, que de manera superficial en un principio, podrían resultar atractivas, pero en un mediano o largo plazo, aparecerían problemas elementales, como cuestiones estructurales, desarrollo de zona, incidencias de terreno o climáticas, entre otros aspectos que se pudieron haber vislumbrado mejor.
Beneficios de invertir en terrenos
- Simple y sencillamente otorga la libertad de construir desde sus bases, el patrimonio que será lo mejor para cada persona y sus seres queridos. De acuerdo al presupuesto inicial, el inversionista podrá elegir los mejores materiales, acabados y mano de obra, dependiendo del mismo entorno, para que haya una verdadera adaptación y completar las expectativas de inversión.
- Más allá de la estética de acuerdo al diseño arquitectónico, permitirá una libertad para añadir los espacios, de acuerdo al plan familiar o económico, en caso de que se piense emplazar algún negocio.
- Y tal vez la ventaja más importante de hacer una inversión en terrenos, es que evita problemas de flujo de dinero, en caso de que surjan complicaciones económicas, en el proceso de construcción, pudiendo pausar la edificación. De hecho, muchos inversores compran los terrenos, para luego construir por etapas, manejando concretos intervalos de tiempo, dependiendo de las necesidades financieras de cada los mismos.
Consideraciones para invertir en terrenos y construir desde cero
- Implica una inversión de tiempo, que en el peor de los casos, pueden implicar muchos años para lograr la consolidación de la vivienda. En ese sentido, si existe la necesidad de habitar una morada de forma inmediata, quizás este tipo de proyecto no sea el más adecuado.
- Asimismo, existen los factores internos que se atienen directamente con el constructor, como materiales disponibles, obra de mano a disposición, entre otros tópicos.
- De repente algo podría salir mal, por ello, la planeación a través de los planos arquitectónicos es fundamental, para evitar esto lo más posible. También hay que tomar en cuenta a los factores externos que no se pueden controlar, como cuestiones climatológicas, la economía del país e incluso, problemas personales o familiares.
Beneficios de invertir en casas como patrimonio rentable
- Para empezar, la entrega es inmediata, si es que se cumple con la documentación y otros procesos legales importantes. Dependiendo de la observación y el análisis de la propiedad ya construida, se sabrán los detalles arquitectónicos que son buenos, así como considerar a los que podrían ser un problema; con base en ello, tener la posibilidad de negociar, antes de adquirir el bien inmueble.
- Por otro lado, se podrán hacer otras proyecciones adicionales, con base en la construcción de la casa, para poder edificar áreas, que se puedan usar como futuras áreas de negocio o como arrendamiento.
- Dentro de los bienes raíces rentables, el financiamiento inmobiliario a través de créditos hipotecarios, permitirá negociar y pagar mensualmente, los montos que se consideren pertinentes, dependiendo de la institución financiera. Habrá una mejor organización económica personal y familiar. En caso de que haya dificultades, entonces negociar con dichas instituciones, para pedir prórrogas u otras facilidades de pago.
Consideraciones de invertir en casas como patrimonio rentable
- Obviamente es una inversión importante, que comúnmente implican grandes gastos; por ello, la planeación económica propia y familiar, debe ser honesta y bien sustentada. No tener cuidado con eso, los pagos de hipoteca podrían llevar hasta los treinta años.
- Los pagos mensuales son definitivos, y aunque se puedan negociar cuotas, dependiendo de la situación, la realidad es que es una deuda de la que difícilmente se podrá liberar.
- La plusvalía de la vivienda aumenta año con año, entonces hay que considerar los nuevos montos, para cubrir los pagos. Asimismo, las obligaciones crediticias implican una reputación dentro del buró de crédito, si no hay cuidado con eso, pueden surgir problemas dentro del crédito hipotecario.